@recomendación

Las autoridades que han sido recomendadas y que han aceptado los instrumentos emitidos por la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal tienen la obligación de realizar todas las acciones necesarias para su cumplimiento. Esto con el fin de que se repare integralmente el daño causado a las víctimas y se implementen correctamente todas las medidas que prevengan la repetición de los hechos.

Las personas que habitan y transitan por la Ciudad de México cuentan con un Organismo Defensor de sus derechos. Es la Comisión de Derechos Humanos de Distrito Federal que comenzó sus funciones desde 1993…ya casi serán 20 años de su creación.

Durante este tiempo ha sido el ejercicio de su autonomía uno de sus valores esenciales tanto en relación con las autoridades del Gobierno del Distrito Federal, como de los distintos partidos políticos, u otros grupos o asociaciones con ciertos intereses que pudieran tener injerencias y/o obstaculizar su adecuado funcionamiento.

Teniendo en cuenta que la Ciudad de México ha sido denominada la “Capital Social”, el respeto y goce pleno de los derechos humanos de todas las personas debe estar garantizado.

Los derechos humanos y el desarrollo social, sin duda convergen en los resultados, es por ello indispensable y necesario el fortalecimiento de las políticas y los procesos con la mayor participación social, ya que ésta es un elemento del desarrollo humano para lograr una transformación efectiva e instrumentación de políticas dirigidas a garantizar una mejor calidad de vida.

Un compromiso efectivo por los derechos humanos es desarrollar una cultura en torno a su respeto, reconocimiento y garantía de ejercicio, a través del impulso de mecanismos, procedimientos, investigaciones, programas y capacitaciones; es decir adoptando todas las medidas posibles que tengan como fin fomentarlos y protegerlos.

Importante es la intervención y el apoyo de las organizaciones de la sociedad civil, de los organismos especializados de carácter internacional, también resulta imprescindible la sensibilización, promoción y respeto real y efectivo por parte de las Instancias del Gobierno.