El TEPJF quita mayoría al PRD en la Asamblea

En los primeros minutos de este miércoles, los magistrados de la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial del Poder Judicial (TEPJF) decidieron retirar la mayoría absoluta a la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) al quitarle los dos diputados porla vía plurinominal.

De esta forma revocaron los fallos del Instituto Electoral del Distrito Federal (TEDF) y del Tribunal Electroal local. Tras lo anterior, determinaron otorgarle esos espacios al PAN y otra al Movimiento Ciudadano.

De esta forma, pierden sus curules su perredistas René Cervera y Xenia Sotelo.

El hacer uso de la palabra durante la exposición de los proyectos de sentencia, el Magistrado Angel Zarazúa Martínez, explicó que la cláusula de gobernabilidad tiene como origen la prevención del dominio de una mayoría parlamentaria que represente una sola opción política en los órganos legislativo de nuestro país.

En su intervención, Roberto Martínez Espinosa, Magistrado Presidente de esta Sala Regional, fue enfático al explicar que de seguir el criterio esgrimido por el Tribunal Electoral del Distrito Federal (TEDF), e impugnado por diversos institutos políticos, la representación de un solo partido alcanzaría el 62% de la Asamblea superando así el límite constitucional que se estipula que un partido político en ningún caso puede tener una sobrerrepresentación mayor a la media de su votación nacional total más un 8% derivada de la suma de representantes de mayoría relativa y representación proporcional, condición conocida como comúnmente como cláusula de gobernabilidad.

Igualmente, el Magistrado Martínez explicó que es necesario un ajuste legislativo a la norma electoral del D.F. ya que se produce una contienda electoral que permite a los partidos contender en común con otros en un gran número e incluso en la totalidad de los distritos, al tiempo que las listas de candidatos de representación proporcional pueden ser presentadas de forma individual por cada partido, haciendo extremadamente difícil definir la voluntad real de los electores al emitir su voto a favor de cualquier opción política coaligada.